Finish lavavajillas, Fairy lavavajillas, Somat o W5 son solo algunos de los ejemplos de lavavajillas con los que nos encontramos en el mercado. Y, ante tanto donde elegir, es normal que tengamos dudas y no sepamos por cuál optar. Hoy vamos a proponerte dos cosas. La primera, que leas toda la información para que sepas cómo moverte en éste ámbito. La segunda, que no lo dudes y solicites muestras gratuitas para probar en tu propia casa aquellos productos que te hayan podido parecer más interesantes.
Y vamos a partir, además, de una información básica que todavía no todo el mundo conoce. Para obtener los mejores resultados con nuestro lavavajillas y que los platos, ollas, vasos, cubiertos y demás siempre salgan impecables ya no hace falta que contemos con sal, detergente y abrillantador. Bueno… sí, pero no. Los detergentes 3 en 1 ya lo tienen todo en un mismo producto para hacernos la vida mucho más fácil. Esta es una buena opción si queremos simplificar esta tarea. Y, además, no solo tienen estos tres ingredientes sino que cuentan con las cantidades ideales para cada lavado.
Otra de las cosas que hay que saber, antes de que hablemos de los distintos detergentes para lavavajillas, es que para obtener buenos resultados hacen falta pasos previos como limpiar el lavavajillas. ¿ Y de que otros pasos previos estamos hablando? Pues de dos cosas bastante obvias pero que no siempre se cumplen. Los restos sólidos, incluso los que se resisten un poco más, tienen que ser eliminados antes de meter la vajilla en el lavavajillas. Además, es fundamental que se coloque correctamente en su interior.
Productos de Finish lavavajillas
Hablamos de esta marca en concreto porque es uno de los principales referentes en el sector. Nos encontramos con Finish lavavajillas en cápsulas, en pastillas o en sus versiones quantum o powerball. Es decir, para todos los gustos y necesidades al igual que las muestras gratis de limpieza y hogar. Desde Finish han llegado a crear el producto Finish limpia máquinas. Este, precisamente, está ideado para eliminar malos olores, suciedad y cal que se van acumulando con el tiempo al usar el lavavajillas. Así, se cuenta con un lavavajillas siempre perfecto como el primer día para poder asegurarnos el mejor resultado a largo plazo.
Tipos de lavavajillas
Finish lavavajillas en cápsulas
El detergente en cápsulas para lavavajillas es muy empleado porque resulta muy cómodo. Las dosis ya tienen la cantidad exacta que se necesita. En su versión powerball, va un paso más allá de las simples pastillas lavavajillas porque incluye un prelavado. Esa bola extra sirve para reblandecer los restos de comida hasta conseguir todavía mejores resultados.
En el caso de Finish powerball quantum estamos hablando de toda una revolución en lo que a detergente se refiere porque el polvo tiene un mayor poder desincrustante; el gel actúa como un antigrasa ante la suciedad más rebelde y aporta brillo y esa powerball consigue secar la vajilla para maximizar el brillo final.
Lavavajillas en geles
Se recomienda solo el uso de esta opción en el caso de que haya que dosificar por cuenta propia la cantidad de detergente que tenemos que usar al emplear el lavavajillas. Esto puede pasar cuando tenemos un lavavajillas compacto, cuando la vajilla está poco sucia o cuando el lavavajillas no se ha llenado por completo.
Igualmente, hay que aclarar que la mayoría de los lavavajillas actuales cuentan con diversos programas también para facilitar el lavado incluso en los supuestos anteriores. Con el gel, el riesgo que corremos es el de pasarnos o el de quedarnos cortos así que dependerá mucho de hasta qué punto lo vamos a necesitar para casos puntuales y lo que nos puede compensar esta compra para dichos momentos.
Cómo elegir el detergente para tu lavavajillas
En cualquier caso, y tanto si optamos por las cápsulas como por el gel, si usamos mucho o a veces el lavavajillas hay una cuestión que no podemos perder de vista. Lo barato sale caro. Optar por marcas como Finish lavavajillas o Fairy se recomienda por un motivo básico: será la única manera de asegurar buenos resultados. Lo que ocurre muchas veces con las marcas blancas es que dan más problemas que otra cosa, aunque siempre se puede probar.
A la larga, de hecho, el no optar por marcas consagradas nos puede llevar a contar con un lavavajillas mucho más estropeado a lo largo del tiempo que lo que cabría esperar y esto se traduce en un nuevo desembolso.
Casi todos los detergentes al igual que los lavavajillas a mano como el Fairy lavavajillas Ultra Poder son eficaces a la hora de eliminar la suciedad más básica. Será en los detalles, como las manchas oxidables que encontramos por ejemplo con el té o los restos proteícos, algo muy común con el huevo, donde notaremos la diferencia. Y donde es posible que les tengamos que dar un repaso.
Si te has fijado también en que quedan algunos ligeros velos blancos o manchas moteadas en las vajillas es que no se está usando un buen lavavajillas. Habrán hecho su función más básica, pero el resultado, en cuanto a la apariencia, deja mucho que desear.
Algo que se puede hacer para luchar contra esos temidos cercos en la vajilla, de querer terminar con ese lavavajillas que no ha dado los resultados esperados, es rellenar el depósito de sal. El mismo electrodoméstico nos avisará cuando lo necesitemos. A esto le podemos añadir algo más. La dureza del agua también influirá mucho en el resultado de la limpieza de la vajilla.
Si vemos que la cal se ha convertido en la peor de nuestras enemigas, habrá que contratacar. Esto se hace, simplemente, empleando un buen antical. Si las manchas blanquecinas todavía persisten puede ser porque el detergente empleado era demasiado abrasivo. En ese caso la vajilla se habrá visto comprometida de manera irreversible, pero habremos aprendido algo en el proceso.
Y, como consejo final, que a nadie se le ocurra abrir el lavavajillas una vez que este haya finalizado. Sí, es verdad que cuentan con una alarma sonora y visual que nos avisa de que su programa ha terminado. Lo que ocurre es que esto no indica que podamos abrir y recoger. Incluso aunque nos encontremos ante un día de lo más ajetreado y cada minuto valga oro, será mejor esperar. Si no, una buena parte del trabajo se dará por perdida.
Lo que ocurre en los siguientes 15 o 20 minutos desde que el lavavajillas nos avisa de que ha terminado de limpiar la vajilla es que la misma se seca. Recordemos que la temperatura interior es bastante elevada y con ese mismo calor que se ha generado se consigue el secado y resultados perfectos. Para que esto ocurra, por supuesto, será fundamental que hayamos colocado la vajilla en el interior del lavavajillas de tal manera que el agua pueda resbalar por las superficies.