La llegada de un bebé cambia la vida por completo. Esto lo saben, perfectamente y en especial, los padres primerizos. Y, por lo general, podemos decir que nos preparamos bastante para toda la parte previa, que comprendería el embarazo, pero no tanto para lo que viene después. Y es que, en este caso, no estamos hablando del bebé. Lo más seguro es que para el recién nacido también tengamos ya de todo desde bastante antes de su nacimiento. Hablamos de cosas como un biberón anticólicos, bodys, o la típica canastilla. De todos estos productos, por cierto, podemos solicitar muestras gratis.
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Pero, en lo que se refiere a la madre… lo más probable es que para el postparto no se haya pensado tanto en la ropa que se puede necesitar. Aquí es cuando podemos hablar de los sujetadores de lactancia. Un elemento que parece muy básico, pero que nos acabará por resultar de lo más práctico.
Y no solo para el posparto, muchas mujeres notan como sus pechos se hinchan desde los primeros síntomas de embarazo y desde entonces deciden pasarse a los sujetadores de lactancia que son muy cómodos.
Para quienes todavía no lo tengan claro, el sujetador de lactancia sería como uno normal solo que permite amamantar al bebé con una mayor comodidad. Será de lo más útil en los primeros meses de vida del bebé, especialmente cuando se trata de madres primerizas. Y decimos esto porque también hay madres que, con algo de práctica, se desenvuelven muy bien incluso con los sujetadores habituales.
Tips para elegir los mejores sujetadores de lactancia
Antes de seguir con el tema de los sujetadores de lactancia, abramos un pequeño paréntesis. Cabe mencionar que también existen los sujetadores premamá y que son, igualmente, importantes. Como se puede imaginar, durante el embarazo el cuerpo de la mujer sufre muchos cambios. El pecho no es ajeno a esto. El sujetador premamá está pensado, precisamente, para estos cambios y es por eso que cuenta con un tejido elástico y suave. Este se adaptará, sin problemas, al contorno del pecho, ofreciendo soporte. Se diferencian bastante fácil de los demás porque tienen una banda y unos tirantes bastante más anchos.
Dicho esto, podemos volver a nuestro sujetador de maternidad o sujetador de lactancia, ya que se conoce de ambas maneras. Y, como era de esperar, se abre todo un mundo ante nosotras así que vamos a intentar clarificar todo un poco y dar los consejos más útiles para que las mujeres embarazadas puedan hacer la elección correcta.
Talla
Es normal que las mamás primerizas no se hagan una idea previa de hasta qué punto su cuerpo puede llegar a cambiar. La realidad es que, aunque haya excepciones, lo hará y mucho. Tanto es así que los expertos aconsejan comprar unas dos tallas por encima de la que es la habitual para el sujatador. Incluso acabrás por ver que muchos sujetadores de lactancia ofrecen solo algunas tallas bastante grandes. Es normal.
Es importante, además, tener presente que el sujetador de lactancia debe ofrecer sujeción, pero nunca comprimir. Además de que si ocurre esto último no resultará para nada cómodo, aquí entra también en juego la salud. Si el pecho se comprime en exceso se pueden tener molestias e, incluso, afecciones como la mastitis.
Abertura
Los sujetadores de lactancia los podemos encontrar, por lo general, con dos tipos de aberturas.
- Vertical. Que con un clip, corchete o similar se engancha en el punto más alto de la copa.
- Horizontal. Permite retirar una parte de la copa hacia un lado.
Pero también nos podemos encontrar en el mercado con sujetadores de lactancia de tela solapada, que dejan al descubierto solo el pezón e, incluso, algunos de lo más sofisticados. Estos últimos pueden permitir incorporar los discos de lactancia y hasta sujetar el sacaleches.
En cualquier caso, aquí no se trata de elegir uno u otro a priori. Será, más bien, una cuestión de probar y ver con cuál de ellos una se puede sentir más cómoda o, hasta usar diferentes modelos para diferentes ocasiones.
Momento de la compra
Es bastante aconsejable esperar, más o menos, hasta el octavo mes de embarazo. Precisamente un poco por lo que hemos comentado hasta ahora. El cuerpo cambiará mucho y es la mejor manera de hacernos una idea real de la talla que vamos a necesitar.
Cantidad
Tampoco hay reglas fijas en esto pero las mismas madres aseguran que unos cuatro sujetadores de lactancia son los aconsejables. Siempre podemos empezar con un par, sobre todo para dar la oportunidad a un par de modelos, e ir viendo si necesitamos alguno más en el armario.
¿Sujetador lactancia con aros o sin aros?
Abrimos un gran debate, pero es necesario hacerlo. En realidad, podemos decir que podemos usar el sujetador de lactancia con aros o sin aros salvo en dos excepciones muy concretas.
La primera sería la de la primera semana de lactancia. Y esto es así porque en este periodo los pechos tienen a endurecerse y a crecer. Es por esto que es mejor que cuenten con tejidos adaptables y que no tengan aros. La segunda es para dormir. Si es la preferencia de la madre, no hay problema, pero aquí también el sujetador de lactancia deberá ser sin aros.
Por lo demás, no habría problema siempre y cuando se elija la talla correcta. El sujetador siempre tiene que sostener el pecho, pero no tiene que oprimirlo.
Recordemos también que el pecho estará sensible y que será más que recomendable usar una crema antiestrías durante el embarazo y a posteriori. Las grietas, por desgracia, sin bastante comunes y es debido a los cambios de tamaño que se producirán. Desde Suavinex han desarrollado una crema para los pezones para las embarazadas que también te invitamos a probar. Solicita tus muestras gratis a domicilio ahora.
Como conclusión podemos decir que el sujetador de lactancia es un básico con el que toda embarazada se tiene que hacer. Hemos podido ver que hay diferentes modelos y que todo será cuestión de probar hasta dar con el que nos haga sentir más cómodas. Tan sencillo y tan difícil como eso. Por eso, y para que no gasten un dineral esta pensado Mejores Muestras Gratis, para que puedas solicitar regalos para embarazadas, productos gratis para bebés… y así ahorres tiempo y dinero.
Lo que siempre tendremos que recordar es que el sujetador de lactancia nunca deberá oprimirnos el pecho. Su objetivo es el de sujetar, el de ofrecer un soporte, pero nada más. Aunque no haya que alarmar a nadie la realidad es que si usamos un sujetador incorrecto nos podemos encontrar con molestias y afecciones. En caso de duda, en las mismas tiendas donde los venden, tan solo tenemos que preguntar. Allí nos ofrecerán el mejor de los consejos y nos iremos a casa con el sujetador que necesitamos.
El cuidado del bebé recién nacido es fundamental y eso nadie lo discute. Lo que ocurre es que si se presta atención a la madre y se la mima, hablamos del sujetador de lactancia o de la crema antiestrías, esta se encontrará mejor y más fuerte. Siendo así, sencillamente, podrá afrontar de una manera más sencilla todos los cambios que se producen. El físico es el más evidente, pero también está el emocional y, por supuesto, un giro en la vida de 180º. Hacer que se sienta cómoda hasta en los pequeños detalles siempre se ve recompensado y se creará un ambiente en casa mucho más relajado.