El otoño es una época del año que nos trae muchos cambios y nuestra piel también lo nota. Después del verano, noto que mi piel está más seca, deshidratada, apagada o con manchas. Por eso, es importante que adaptemos nuestra rutina facial a las nuevas necesidades de nuestra dermis cuando llega el otoño. ¿Quieres saber cómo lo hago yo? Pues en este artículo voy a contarte todo lo que necesitas saber para que tu piel reciba todos los cuidados que necesita después del verano. Además, descubrirás que puedes conseguir muestras gratis de productos que te ayudarán a lucir una piel perfecta en otoño.
Índice
¿Por qué es importante cambiar la rutina facial en otoño?
La piel de nuestro rostro es la que está más expuesta a los agentes externos. Por eso, debemos protegerla y mimarla durante todo el año. Sin embargo, cada estación tiene sus propios retos y características que influyen en el estado de nuestra piel.
En verano, la piel está más expuesta al sol, cloro, salitre y sudor, lo que puede causar deshidratación, irritación, quemaduras o manchas. Al llegar el otoño, la piel aún refleja los daños del verano y se enfrenta además a un clima más frío y seco, lo que contribuye a la pérdida de elasticidad, luminosidad y firmeza. Por eso, es fundamental ajustar la rutina de cuidado facial en otoño, utilizando productos que ayuden a reparar la piel, hidratarla profundamente y prevenir el envejecimiento prematuro.
¿Cuáles son los pasos de la rutina facial para otoño?
Los pasos a seguir en la rutina facial para otoño son básicamente los mismos que en el resto del año. Lo importante es que elijas los productos adecuados según las necesidades de tu piel.
1. Limpieza
La limpieza es el primer paso imprescindible de cualquier rutina facial. Es importante limpiar la piel por la mañana y por la noche para eliminar el maquillaje, el sudor, la suciedad y las impurezas que se acumulan en los poros. De esta forma, evitamos que la piel se obstruya, se inflame o se infecte.
Hay muchos tipos de limpiadores faciales: geles, espumas, leches, aceites, aguas micelares… Lo importante es que sean suaves y respetuosos con el pH de nuestra piel. Un limpiador que a mí personalmente me encanta es el Neutrogena Hydro Boost Limpiador Gel de Agua. Es un gel ligero que se activa con el agua y forma una espuma suave que limpia la piel sin resecarla ni irritarla. Contiene ácido hialurónico, que ayuda a retener la humedad natural de la piel y a reforzar su barrera protectora.
2. Tónico
Es el segundo paso de la rutina facial y tiene varias funciones: equilibrar el pH de la piel después de la limpieza, refrescarla, hidratarla y prepararla para recibir los tratamientos posteriores. El tónico se aplica después de limpiar la piel y antes de aplicar el sérum o la crema.
Para elegir un buen tónico, debes tener en cuenta tu tipo de piel y los beneficios que buscas. Hay tónicos que tienen propiedades calmantes, astringentes, antioxidantes, iluminadoras… Lo importante es que no contengan alcohol ni otros ingredientes irritantes.
3. Sérum
Este es el tercer paso en la rutina de cuidado facial y uno de los que más beneficios ofrece para la piel. Se trata de un producto concentrado con una alta cantidad de activos que penetran en las capas más profundas de la piel, actuando desde el interior. El sérum se debe aplicar después del tónico y antes de la crema hidratante. Existen sérums con propiedades hidratantes, antiarrugas, antimanchas, reafirmantes, y regeneradoras. Lo más importante es que elijas uno que se ajuste a tus necesidades y expectativas específicas.
4. Crema
Es el último paso de la rutina y el que sella todos los productos anteriores. La crema tiene la función de hidratar, nutrir y proteger las capas más superficiales de nuestra piel. Para la rutina facial de otoño, es recomendable usar una crema más rica y nutritiva, pero sin que llegue a ser pesada o grasa. Yo uso las de la línea Biotherm Aquasource que hidratan en profundidad y son frescas y ligeras.
Cómo elegir la mejor rutina facial de otoño para ti
Para encontrar la rutina facial ideal para ti, es importante tener en cuenta varios factores que afectan tu piel. Primero, considera tu tipo de piel: seca, grasa, mixta, normal o sensible, ya que cada tipo tiene características y necesidades únicas. Segundo, tu edad juega un papel clave, ya que influye en el grado de envejecimiento y los productos adecuados para prevenir o tratar sus signos. Finalmente, tus preferencias personales, como tus gustos, presupuesto y el tiempo que dedicas a cuidar tu piel, también son esenciales para adaptar tu rutina de manera efectiva.
Ya has visto lo importante que es adaptar tu rutina facial para el otoño, para que tu piel se recupere y luzca siempre sana y radiante, pero también es cierto que a veces cuesta dar con el producto adecuado. No te preocupes, en nuestra web puedes conseguir muestras gratuitas para que puedas probar los mejores productos para tu rutina facial y encontrar el mejor para ti sin gastar dinero.