Si estás preparando todo para la llegada de tu bebé, seguro que habrás visto o alguna mamá te habrá recomendado que prepares también manoplas para bebé. Así que, sobre todo si eres madre primeriza, te estarás preguntando si debes ponerle a tu bebé esas mini manoplitas tan monas que muchas veces hacen juego con la ropita. Está claro que lo que quieres es proteger a tu pequeño cuanto sea posible. Sin embargo, las manoplas para bebé no son tan buenas como parecen.
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Y ya que hablamos de preparar la llegada de tu bebé, si quieres conseguir muestras gratis de productos para ti y para tu bebé que te ayudarán a ahorrar dinero mientras preparas la canastilla, ya sabes que en nuestra web puedes solicitar muestras gratis a domicilio de un montón de productos. Además, también encontrarás trucos y recomendaciones, y yo misma te cuento mi experiencia con cada uno de ellos y te doy mi opinión sincera.
Si quieres saber por qué no es recomendable usar manoplas para bebé y qué alternativas tienes para no tener que recurrir a ellas, sigue leyendo, en este artículo te cuento todo lo que necesitas saber para que puedas tomar la decisión más acertada.
¿Qué son las manoplas para bebé y por qué se usan?
Antes de entrar en los motivos por los que no es demasiado aconsejable ponerle manoplas a tu bebé, vamos a ver qué son exactamente y por qué algunas madres las usan.
¿Qué son las manoplas para bebé?
Las manoplas para bebés son unos pequeños guantes que se les suelen poner a los recién nacidos para evitar que se arañen la cara con sus uñas o para proteger sus manitas del frío. Son como pequeñas bolsitas que se ajustan a su muñeca normalmente con un elástico y suelen ser de algodón o de lana. Los hay con diferentes diseños de distintos colores o estampados.
¿Por qué se usan las manoplas para bebé?
Hay muchas madres o padres que piensan que las manoplas para bebé son necesarias para proteger las manos de su bebé, ya que al nacer suelen tener las uñas largas y afiladas, y creen que con las manoplas evitan que el bebé se haga daño en la cara o en los ojos con sus propias manos.
También hay quien suele usarlas para abrigar las manos del bebe cuando hace frío o para prevenir posibles alergias a algún tejido o producto. Poniéndoles las manoplas para bebé se sienten más seguras y tranquilas de que sus bebés están mejor cuidados. Pero lo cierto es que tienen muchas menos ventajas de lo que piensan.
¿Por qué no poner manoplas a los bebés?
Aunque antiguamente su uso era muy recomendado, precisamente para que no se arañaran o para protegerlos del frío, y aunque pueden parecer una buena idea, lo cierto es que las manoplas para bebé tienen más inconvenientes que beneficios. Estas son algunas de las razones por las que no se deberían poner manoplas a los bebés :
- Limitan el desarrollo sensorial del bebé. Las manos de los bebés son una de sus principales vías de exploración y aprendizaje. El sentido del tacto es de los primeros que desarrolla y tocando es como empiezan a adaptarse al mundo exterior, conocen su cuerpo y también utilizan el tacto para conectar con la madre durante la lactancia. Si se cubren sus manos con las manoplas, se le priva de la posibilidad de tocar, sentir y descubrir el mundo que les rodea.
- Impiden la auto-regulación térmica. Al nacer, los bebés tienen una capacidad limitada para regular su temperatura corporal, por ello es importante que estén en un ambiente adecuado. Al ponerles manoplas para bebé se puede alterar su equilibrio térmico y provocarles sudoración, irritación y en algunos casos hasta hipotermia.
- Favorecen la proliferación de bacterias y hongos. Los bebés suelen llevarse la mano a la boca y también sudan, esto hace que las manoplas se humedezcan. Al estar húmedas crean un ambiente propicio para que crezcan microorganismos que pueden causar infecciones o alergias en la piel del bebé.
- Dificultan el agarre y la coordinación. Las manoplas evitan que el bebé pueda abrir y cerrar las manos con facilidad y esto hace que no puedan agarrar bien los objetos que despiertan su curiosidad, afectando también a la capacidad de coordinar bien sus movimientos.
- No son infalibles para evitar que el bebé se arañe. Las uñas de los bebés son tan finas y flexibles que pueden atravesar con facilidad las manoplas, por tanto no siempre evitan que se arañen.
¿Qué alternativas hay a las manoplas para bebé?
Si quieres proteger a tu bebé de los arañazos y el frío tienes otras opciones mejores que las manoplas para bebé. Aquí tienes algunas de ellas:
- Córtale las uñas con frecuencia. Así evitas que las tenga demasiado largas y se haga daño. Hazlo cuando duerma o esté tranquilo y con unas tijeras especiales para bebés o una lima suave y siguiendo la forma natural de los dedos. Puedes conseguir estos productos gratis solicitando las muestras gratis para bebé que encontrarás en nuestra web.
- Vístele con ropa adecuada al clima. Para evitar que tenga demasiado frío o demasiado calor elige prendas suaves, transpirables y cómodas. En invierno opta por sacos o guantes sin dedos que se puedan quitar fácilmente.
- Hidrata bien su piel. Para prevenir la sequedad y que su piel esté demasiado sensible y se irrite con facilidad, usa cremas naturales que hidraten su piel, después del baño o cuando notes que es necesario. También puedes refrescarle al mismo tiempo que le perfumas usando perfumes para bebé, son especiales para ellos, hipoalergénicos y sin alcohol, por lo que no dañan su delicada piel.
Como has podido comprobar, las manoplas para bebés no son la mejor opción para proteger a tu bebé del frío ni para evitar que se arañe. Por el contrario, pueden perjudicar su desarrollo sensorial, su regulación térmica, su salud y su coordinación. Por este motivo, mi recomendación es que optes por otras alternativas más beneficiosas para él, como cortar sus uñitas con frecuencia, vestirle con ropa adecuada y mantener su piel cuidada. Pero recuerda que lo más importante es darle mucho amor y atención, y que la decisión final siempre es la que tú consideres más conveniente. ¡Disfruta mucho de tu bebé!