Antes de nada, conviene partir de una premisa básica. En casi todos los hogares se puede ahorrar energía. Y, en realidad, para esto hay muchas soluciones posibles. Hablamos de optar por electrodomésticos más eficientes, por ejemplo. En el corto plazo, supondrá un desembolso mayor pero, con el tiempo, el ahorro está garantizado. Si a estos se les suma productos de alta calidad, como puede ser Fairy Platinum en los lavavajillas, el resultado perfecto está garantizado en el menor tiempo posible. Además, se pueden probar a través de sus muestras gratis.
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Igualmente, se puede conseguir ahorrar energía limitando los tiempos de ciertos hábitos, como puede ser optando por una ducha en lugar de un baño o reduciendo la potencia de la luz.
Pero antes de poder pasar al ahorro en sí, conviene, por supuesto, analizar cada caso en particular y ver en qué se puede ahorrar más en cada hogar. Hay que tener en cuenta que con el ahorro de energía no solo se ayuda a nuestras finanzas, sino que supone un ejercicio de sostenibilidad para el planeta que es, cada vez, más necesario.
Por regla general, en lo que más se consume en los hogares es en calefacción durante el invierno o aire acondicionado durante el verano. De hecho, llega a representar casi el 50% del gasto energético anual.
Cómo puedo ahorrar energía: consejos útiles
Todo dependerá de hasta qué punto una persona pueda y/o quiera cambiar su casa, en el sentido de adaptarla y adaptar también sus hábitos. Pero, por lo general, se pueden seguir estos consejos.
Cambiar los electrodomésticos
Limpieza y hogar son dos términos que van siempre cogidos de la mano. Los electrodomésticos, al igual que las muestras gratis de productos de limpieza por suerte, nos han dado una ayuda significativa en todo lo que a las tareas del hogar se refiere. Algunos de los más relevantes son la lavadora, la aspiradora o el lavavajillas. Todos ellos necesitan de la electricidad. Actualmente, en el mercado se pueden encontrar numerosos modelos y categorías diferenciadas en función de su consumo.
Como ya anunciábamos, los que consumen menos suelen tener un coste más elevado respecto a los demás. Aun siendo así, siempre conviene hacer las cuentas. En el corto y largo plazo se podrá ahorrar energía, sin lugar a dudas, y esto se traduce, directamente, en un ahorro económico. Si a esto le sumamos el uso de productos específicos y de buena calidad, el resultado será inmejorable y el consumo el más bajo. Es lo que sucede con marcas de prestigio como Wipp Express, ideales para usarlas en lavadoras eficientes.
Limitar la potencia
Para esto deberemos conocer los hábitos que tenemos. Bastará con echar un vistazo a las facturas. Si vemos que entramos dentro de los parámetros para usar potencia eléctrica contratada con un límite, conviene hacerlo. El ahorro en la factura es directo.
Concentrar la energía
Ya hemos comentado que uno de los mayores gastos en los hogares es la climatización. Una muy buena idea al respecto es emplear este tipo de aparatos solo donde sean necesarios. Es decir, donde nos encontremos. Si se está en el salón, mucho mejor cerrar todas las demás puertas y concentrar esa energía en ese espacio.
Evita el consumo silencioso
¿Habías oído hablar de este término? No te preocupes, la mayoría de las personas, no. Casi siempre dejamos los electrodomésticos conectados a la red eléctrica, incluso cuando estos no se están usando. Por ejemplo, la máquina del café, la tostadora o la misma televisión. Eso ya consume y no poco. Se calcula que supone el 10% del consumo total. Siempre que se pueda, mejor desenchufar todos los aparatos eléctricos posibles.
Cambio de bombillas
Igual que ocurre con los electrodomésticos, supone una inversión, pero merece la pena. Siempre que se pueda será mejor cambiar las bombillas y optar por aquellas que sean LED.
Aprovechar la luz solar
Estamos tan acostumbrados a contar con diferentes elementos con luz, como los mismos teléfonos móviles, que a veces no reparamos en que la mejor y mayor fuente de luz que tenemos es natural. Siempre que se tenga la posibilidad de iluminar el hogar con la misma luz solar, mejor que mejor.
Ahorrando energía
Ahorrar energía puede entenderse de manera literal, que sería un poco todo lo relacionado con lo comentado con anterioridad. Pero también, con el ahorro de energía que nosotros mismos tenemos que dedicar y con el ahorro en sí como concepto base.
Seguramente, uno de los electrodomésticos que más se usan en la actualidad y que no faltan en ninguna casa es la lavadora. Supuso una revolución ya en el año 1851 y hasta nuestros días no ha dejado de ganar adeptos.
Una cosa importante que se debe saber al respecto es que es básico limpiar la lavadora o limpiar el lavavajillas para alargar la vida de los mismos y que es una excelente idea usar solo buenos productos , como es el caso de toda la gama de Ariel. Ahorrar energía en estos casos se produce no solo por elegir un buen modelo de lavadora o lavavajillas sino también por optar por el programa más adecuado en cada caso y por los productos que den mejor resultado. De esta manera, con un solo lavado la ropa siempre estará perfecta.
Como se ha podido comprobar, sí es posible ahorrar energía. Es más, es recomendable y nada complicado de conseguir. Tan solo será cuestión de seguir algunos consejos útiles y adaptar ciertos hábitos. Al final, todo esto se convertirá en rutina y será algo que se notará en el bolsillo.
Un consejo que funciona muy bien es empezar por las cosas más básicas. Por ejemplo, se puede decidir acabar con todos los stand by de la casa, esa lucecita roja que nos indica que un electrodoméstico está conectado y listo para ser usado, incluso cuando está apagado. Cada noche antes de ir a dormir o antes de ir al trabajo se pueden desenchufar. Incluso puede que no sea necesario hacer esto con todos, aunque sería lo ideal, pero sí con algunos básicos. Por ejemplo, es algo que ocurre mucho con el equipo de música, que salvo excepciones, no se usa constantemente.
Después, y siempre que se pueda llevar a cabo una inversión, lo mejor es cambiar todos los electrodomésticos de la casa posibles por aquellos que sean más eficientes. Esto tampoco tiene por qué hacerse todo de un día para otro. Es más, no es lo más habitual, pero se puede ir ahorrando teniendo esto en mente e ir haciendo los cambios poco a poco. Un electrodoméstico eficiente puede suponer ahorros desde el 10 al 40% de energía.
Ahorrar energía es posible y necesario, tanto para cada hogar como para el planeta en sí. Depende de nosotros que la sostenibilidad sea una realidad. Y aquí una ayuda: Método para ahorrar dinero. Espero que te guste.
